A medida que pasan los años los seres humanos nos convertimos en personas más difíciles de comprender porque pensamos de una manera y actuamos de otra.
Tenemos un problema innato, y es el de creernos que los demás deben entender nuestras acciones, estando nosotros conscientes de que sino hablamos a corazón abierto, estamos impidiendo que esto pueda suceder.
Hemos llegado al extremo de quitarnos nuestros zapatos, dejarlos olvidados a un lado y ponernos otros sin consentimiento de la persona a quien le pertenecen. Pero lo que es preocupante no es esto, sino que en vez de hacerlo para pensar, sentir e intentar comprender lo que lleva a ese alguien a ser como es, lo hacemos para criticar y juzgar, basados en la ciega idea de que es que el otro no quiere ver donde esta su error, y ese tan pronunciada frase "lo fácil que lo resolvería yo".
"Cada cabeza, es un mundo", y efectivamente así es. Ni siquiera alguien que lleve tu sangre tiene la capacidad o don especial para pensar y ver las cosas igual que tu. Por más que queramos creer en la idea de que existen leyes de vida que todo ser humano "conoce" y por "ende" debe seguir al pie de la letra, jamas sera así, porque nadie ha vivido en las mismas circunstancias tuya, mucho menos ha sido educado, aconsejado, preparado para enfrentar la vida como lo hicieron contigo.
Esto para quienes analizamos hasta el mínimo detalle el comportamiento de algunas personas, buscando comprenderlos y no juzgarlos (porque es obligatorio recordar que somos humanos) nos enseña que hay que aceptar a las personas tal cual son, respetar sus opiniones y acciones, querer por los valores que caractericen a ese alguien, por lo que te llevo a acercarte y compartir tu tiempo.
Aquí unos cuantos errores que cometemos a diario, sin querer y queriendo. Lo más triste es que ya los conocemos porque vivimos ahogándonos en ellos, deseando solo poder flotar en ocasiones y no en si alejarnos rápidamente como corresponde.
*Lastimamos a quienes mas amamos*
*Nos sostenemos de recuerdos dolorosos*
*Damos consejos pero no lo aplicamos en nosotros*
*Nos aferramos a una idea que sabemos es incierta*
*Recordamos las cosas que no merecen ser recordadas*
*Depositamos nuestra confianza en quienes desconocemos*
*Luchamos por lo que no tenemos y al tenerlo no lo valoramos*
*Nos concentramos en todo aquello que no podemos controlar*
*No cerramos las puertas equivocadas e ignoramos las correctas*
*Nos olvidamos de ser fuertes teniendo en frente nuestras debilidades*
*Permitimos que el cansancio sea más fuerte que nuestro compromiso*
*Conocemos lo que nos hace daño y permitimos que nos siga haciendo*
*Queremos conocer lo que no podemos e ignoramos lo que si podemos*
*Deseamos cosas desconociendo si estamos preparados para recibirlo*
*Deseamos conseguir algo pero no hacemos lo que realmente debemos*
*Somos defraudados y ciegamente volvemos y confiamos*
*Ponemos excusas sin antes enfrentarnos y disponernos a lograr el reto*
*Nos hacen daño y nos proponemos pagar con la misma moneda*
*No nos comprometemos 100% para lo que queramos de verdad salga bien*
*No aceptamos la felicidad de los demás pero queremos celebren las nuestras*
*Queremos triunfar pero no dejamos de codiciar el éxito de otros. Así no.*
*Dejamos algo para ponernos a prueba de si eso es lo que en si queremos*
*Nos perdonan conscientemente y pretendemos que olviden lo que hemos hecho*
*Queremos cambiar y opinar de los errores de otros sin antes resolver los nuestros*
*Tenemos en nuestro poder lo bueno, lo conocido y aun así ansiamos lo desconocido*
*Queremos que algo funcione, pero sin antes intentarlo ya estamos pensando negativo*
*Si sabemos que estamos hiriendo a alguien nos hacemos ciego a la idea de perderlo*
*Creemos saber cuando alguien merece más que uno y cuando no. Esto solo lo sabe Dios*
*Nos caemos, nos levantamos, continuamos caminando, nos encontramos a la misma piedra, volvemos y nos caemos de nuevo*
En otras palabras, en general, muchas personas opinando en la vida de los demás, y yo pienso algo. Se tiene que ser muy comprensible, tener un corazón demasiado noble para ponerse en los zapatos de otro y aceptar las personas tal cual son.
Se debe ser muy fuerte, lo suficiente racional y lo debidamente sentimental cuando la ocasión lo amerite. Solo conociendo que es lo que queremos sinceramente y lo que no queremos vamos a evitar poco a poco recibir las sorpresas y galletas que nos pega la vida.
Si usted no es así, le aconsejo lo haga, y no por los demás, sino por usted. Haga un chequeo interno a si mismo, porque no hay algo peor que hacerse ciego ante los propios defectos y critico de los ajenos.
No es mentira que haciendo, deseando y pensando en el bien recibimos el bien, mucho menos que haciendo, deseando y pensando en el mal recibiremos como resultados el mal que provocamos. Todo lo que nos pasa es provocado por uno mismo, tenemos el freno para detener todo aquello que creemos imposible controlar. Es cuestión de decisión y acción hasta lograrlo. Sin importar que tan difícil parezca o de quien pueda intervenir con opiniones sin haber enfrentado como tu esas pruebas.